“Respondió Job a Jehová y dijo: Yo conozco que todo lo puedes, y que no hay pensamiento que se esconda de ti�?/FONT> ( Job: 42:1 ) Llegó el dÃa para asistir a la iglesia, me dà un buen baño, tome una tacita de café y luego me senté a la mesa, en donde tengo: · Mi Biblia con mis anotaciones · dos versiones más: Dios habla hoy y la Biblia de Jerusalen · dos diccionarios · la concordancia completa de la Biblia · el comentario BÃblico de Mathew Henry · y unas cuantas páginas de papel en blanco En mi grabadora hé puesto la música instrumental de mis himnos favoritos, de la colección “Himnario de tesoros musicales�? Ya me siento en el cielo, la música ha estremecido mi alma, me hé olvidado de todo, ¡ Oh, Dios mÃo, que momento mas bello!, ¡ Cuanto anhela mi alma, mas momentos asÃ!. ¡Santo Dios!, ahora que siento gozo, tambien me invade la tristeza, me duele el alma saber que en este mismo momento hay miles de personas sufriendo, desesperadas y angustiadas, llorando y gimiendo en profundas luchas; hay miles que hoy no podrán asistir a la iglesia porque tienen el corazón desgarrado. ¡Dios mÃo, se me parte el alma!, al pensar en muchas madres que hoy solamente comeran arroz con sus hijitos; puedo imaginarme a aquel padre de familia que no tiene dinero, que está muy triste y que sin embargo luchará para estar en el culto. Los himnos seguÃan, mientras mi alma se estremecÃa, comencé a orar por todos los que sufren, por los que están esperando un milagro, si, por los que esperan la ayuda de Dios. La respuesta la sentà en mi corazón, mientras mis oidos escuchaban la melodÃa: �?Oh, Dios eterno, tu misericordia ni una sombra de duda tendrá; tu compasión y bondad nunca fallan y por los siglos el mismo serás�?/FONT> Reflexion escrita por
Las reflexiones de Jose Luis G.(Md.& Dr.), son originales, con derechos reservados y autoriza al pueblo de Dios para compartirlas, y colaborar en el engrandecimiento del Reino de Jesucristo. |