LIBRAME PRONTO
Escrito por Jose Luis Gonzalez
En ti, oh Jehova, he confiado; no sea yo confundido jamas; librame en tu justicia.
Inclina a mi tu oido, librame pronto;
Se tu mi roca fuerte, y fortaleza para salvarme.
Porque tu eres mi roca y mi castillo;
por tu nombre me guiaras y me encaminaras.
Sacame de la red que han escondido para mi, pues tu eres mi refugio.
En tu mano encomiendo mi espiritu.
Tu me has redimido, oh Jehova, Dios de verdad.
( Salmos 31: 1-5 )
Los siervos que hemos pasado momentos angustiosos en las profundidades de la confusion, podemos comprender este grito de David.
Es un grito en silencio, desde el fondo de su alma.
Es el que surge, cuando todo esta perdido, y cuando el enemigo ha logrado rodearnos y golpearnos hasta ya no dejar espacio en nuestra vida, que no haya tocado.
Duele, al grado de sentirnos desfigurados como seres humanos; duele, al grado de sentir, que ya no merecemos disfrutar de los beneficios de la vida, porque todo se nos niega, todo se nos opone.
Llegamos a sentir, la gran oposicion a la que nos enfrentamos por ser siervos de Cristo, y hasta sentimientos de murmuracion en el fondo del alma pueden estar gestandose en contra de Dios.
Pero todo tiene un limite,
y ya, al borde de la desesperacion,
como un niño, brota del alma, este clamor,
aunque ya sin fuerzas,
surge el ultimo aliento de confianza y de alabanza,
y nos damos cuenta, que Dios,
siempre ha estado con nosotros.
oracion
Amado Padre celestial, estamos ante el trono de la gracia, para interceder por todos tus siervos, que sufren los mas fuertes ataques de las tinieblas, por tu causa,
Por todos aquellos que sufren en silencio, esperando en ti.
Por todos los que sufren enfermedades, pobrezas, y todo tipo de angustias.
Te pedimos amado Padre, que vengas a librarnos
pronto,
que nuestros dias, se alegren, y que nuestros nombres sirvan, para testimonio de tu gran amor.
En el nombre de Cristo Jesus,
Amen
y
Amen.
Las reflexiones de Jose Luis G.(Md.& Dr.), son originales,
con derechos reservados
y autoriza al pueblo de Dios para compartirlas, y colaborar en
el engrandecimiento del Reino de Jesucristo.