Salmo 22 EL BUEN PASTOR El Señor es mi Pastor, nada me falta: en verdes praderas me hace recostar; me conduce hacia fuentes tranquilas y repara mis fuerzas; me guÃa por el sendero justo, por el honor de su nombre. Aunque camine por cañadas oscuras, nada temo, porque tu vas conmigo: tu vara y tu cayado me sosiegan. Preparas una mesa ante mÃ, enfrente de mis enemigos; me unges la cabeza con perfume, y mi copa rebosa. Tu bondad y tu misericordia me acompañan todos los dÃas de mi vida, y habitaré en la casa del Señor por años sin término. Salvador |